A la tercera va la vencida.
La expresión "a la tercera va la vencida" indica que a la tercera tentativa se consigue el fin deseado. Antiguamente el significado era otro. Correas señala que en tiros y caídas de lucha, la tercera es la que se daba por válida.
En el Diccionario del Padre Esteban de Terreros se recoge la explicación de este modismo:
"En la milicia romana había los soldados llamados pilati o velites, armados a la ligera, y eran los del ínfimo pueblo y los bisoños, y éstos iban en la fila primera; en la segunda iban los que llamaban piqueros, bastati, y excedían en valor y mérito a los primeros, y ne la tercera fila iban los que llamaban triarios, y eran más valerosos, veteranos, y que sostenían a las dos filas precedentes, y de aquí vino el adagio de decir cuando se echaba el último esfuerzo: ad triarium ventum est, que en castellano decimos a la tres va la vencida o se echa el resto.
Otros opinan que el dicho viene del Derecho Penal de los siglos XVI y XVII, que imponía la pena de muerte al tercer robo o hurto.